Vamos a construír un tamborete o tamboril pequeño medieval. Decidí construir un pequeño tamborete para poderlo tocar con la flauta renacentista en Sol, de sonido suave y a la cual suelen tapar tamboriles mayores, como el cacereño que utilizo habitualmente. El mismo proceso pero con materiales de mayor tamaño es válido para hacer algunos tamboriles tradicionales españoles como el tamborí de Mallorca, Ibiza y algunos modelos más grandes del norte de Cáceres, pues estos tienen en común la falta del aro de madera que rodea al parche. Por ese motivo no daré muchas medidas, solo las más generales, así cada cual se podrá construir el tamaño que le interese. Los materiales a utilizar son los siguientes: -Una lata o caja de madera cilíndrica o tubo de PVC -Piel -Cuerda de algodón -Cordón de bramante -Cuero o badana -Hilo de coser fuerte Las herramientas a usar son: Tijeras, Aguja de coser, Taladro. 1.- Limpiamos y pintamos el cuerpo del tamboril, ya sea de PVC, madera o lata. Tendremos cuidado de protejer, limar bien o doblar las aristas cortantes de los extremos que de otro modo podrían dañar la piel al tensarla. Quiero aclarar que si bien los modelos originales son de madera, no hay que echarse las manos a la cabeza con falsos purismos, ya que son numerosísimos los tamboriles en el contexto tradicional que durante todo el siglo pasado se han hecho con latas más o menos grandes y cajas de arenques, etc. debido a la dificultad de doblar la madera... y bien conocido de los estudiosos de los instrumentos tradicionales es el aprovechamiento en el medio rural de los medios que el hombre tiene al alcance de la mano. Por ello, si lo que tenemos a mano (como yo) es un trozo de tubo de PVC de 160 mm de diámetro, eso es lo que utilizaremos. Y si sabemos doblar madera, ya sea con calor o con agua, y disponemos de los moldes necesarios podemos hacer el cuerpo de una pieza de tablex o contrachapado con las dimensiones que nos gusten. 2.- Cortamos las pieles de forma circular de manera que sean dos o tres cm más grandes que el diámetro del cuerpo del tamborete. Las ponemos en remojo una noche entera. 3.- Con cuerda, alambre o varilla de hierro, hacemos dos círculos con un diámetro mayor que el del cuerpo del tamborete y menor que el diámetro de las pieles. 4.- Con aguja e hilo fuerte, cosemos la piel al soporte circular tal y como se ve en la foto. 5.- Para que la piel no se mueva mientras la cosemos podemos fijar los cuatro cuadrantes de la misma como se nos ocurra. 6.- Una vez terminadas de coser las pieles, las presentamos sobre el cuerpo del tamborete para comprobar que sobresalen un poco en diámetro. 7.- Hacemos ocho agujeritos equidistantes en los extremos de las pieles, lo justo para pasar las cuerdas que las tensarán. Ponemos una piel en cada lado del tamborcillo y empezamos a pasar la cuerda por los agujeros siempre en el mismo sentido y tensándolo poco a poco. No es nada dificil, pero hay que ir haciendolo despacio hasta que las pieles vayan quedando centradas. Hecho esto, hacemos un nudo provisional y cortamos el exceso de cuerda, ya que puede hacer falta tensar más o aflojar según se vaya secando la piel. Una vez quede tenso a nuestro gusto, se puede hacer un nudo definitivo. 8.- A continuación haremos las abrazaderas o castigaderas de cuero para tensar el tamboril.En estos tamboretes pequeños puedenhacerse los anillos con trozos de la misma cuerda, pero yo los haré de cuero en la manera tradicional, sin remaches. Para ello, partiendo de un rectángulo de cuero cortaremos unas piezas en forma de flecha como se ve en la foto, haciendo en la parte de atrás una pequeña rajita no muy larga, ya que si nos pasamos no funcionará el sistema, pues al tensar se deshará el anillo. 9.- Cerramos el anillo de cuero como se ve en la imagen para comprobar que no se suelta. Hecho esto, los abrimos de nuevo y los colocamos alrededor de los ocho vértices de los triángulos que forma la cuerda tensora del tamborete. 10.- Solo nos queda colocar el bordón o bordones en una de las pieles del tamborcillo. Para ello usaremos cordón de bramante o tripa si tenemos. Lo fijaremos a dos vértices opuestos de la cuerda tensora. En tamboriles grandes, se suele colocar una clavija tensora en el cuerpo de madera. No debemos olvidar tampoco hacer un pequeño agujerito (de unos 6 ú 8 mm) en el centro del cuerpo del tamborete para que salga el aire al golpear el parche cuando tocamos. 11.- Como vemos, este tamborcillo es pequeño, solo tiene un diámetro de 160 mm y una profundidad de la misma medida, podemos darnos cuenta del tamaño al compararlo con un tamboril cacereño o salmantino. Pero como decía antes, el proceso es similar en tamboriles mayores. 12.- Y ya solo nos queda tocar el tamborete con una flauta de tres agujeros, ya sea tipo renacentista, de suave sonido y a la que le vienen bien pequeños tambores no muy ruidosos o con la que más nos guste. Juanma Sánchez - Madrid 2002